La problemática del tránsito como problema de
salud pública
Mg. Jorge Shimabukuro
Cada
día al iniciar la jornada nos encontramos con un panorama desordenado y hasta
caótico en las calles de nuestra ciudad, estamos viviendo en una “jungla” donde
existen reglas y normas dadas y que cada vez menos personas respetan, más por
el contrario son violadas sistemáticamente e impunemente pues en esta “jungla
urbana” en la que “sobrevivimos” todos los ciudadanos, la convivencia ciudadana
se hace cada vez más compleja y estresada, caminar por las calles de Lima se ha
tornado una incertidumbre, si ya el nivel de delincuencia se ha tornado en “muy
peligrosa” para cada ciudadano de a pie sin ser exagerado o dramático, y no es
una pseudopercepción o percepción de inseguridad como se nos pretendió hacer
creer, la realidad se impone y producto de ello es que surgió lamentablemente
“El chapa tu choro…” al que se le añadió la violencia “justiciera” “…Y déjalo
paralítico”… De este tema me ocuparé en otro artículo…
El
problema del transporte en la ciudad, es como ya sabemos un caos, no tenemos
firmeza en poner orden, las reglas y normas existen y son muy claras, sin
embargo, es como el “gran bonetón”, nadie quiere tener entre sus manos tamaña
responsabilidad porque es como “una papa caliente” o quizá “hirviente”… Qué
encontramos en nuestro diario andar… Sales de casa, pones un pie o un zapato
fuera y automáticamente ingresas a un mundo caótico, a una realidad donde hay
que sobrevivir como puedas, se impone la “ley del más ‘vivo’ el criollazo”,
entonces vas por la calle y te diriges a tu destino, trabajo, centro de
estudios, colegio, academia, instituto, universidad, otros más temprano salen
por el pan y alguito más para el desayuno, otros menos para hacer algo de
deporte para iniciar mejor el día… Y todo esto es el inicio de los graves
problemas de salud pública que se generan, citaremos, problemas respiratorios
todos los que conoces y algunos más, problemas dermatológicos varios, problemas
en los sentidos principalmente a nivel auditivo por la gran contaminación
sonora, además de los problemas en la salud psicológica que se deriva del caos
del transporte, estrés principalmente con todos sus componentes, mal humor,
irritabilidad, ansiedad, intolerancia, problemas de somatización o de agravamiento
de la propia salud por las enfermedades crónicas que se pueden complicar, asma,
diabetes, problemas cardiacos, úlceras, etc…
Y
entonces, te armas de valor y decides salir de casa y te encuentras con el
“caos”, cada minuto que avanza y empieza a hacerse cada vez más y más caótico,
la ciudad se sigue agobiando, autos, taxis, motos, triciclos, coaster, combis,
buses, camiones, montacargas, volquetes, y todo lo que puedas imaginar… ahhh
claro, peatones, muchos peatones que van y vienen apurados porque están ceñidos
a la hora “cabana” y algunos a la “hora peruana”, invaden todo, en su andar
desordenado, corren para alcanzar un medio de transporte, no importando si
cruzan intempestivamente una pista, se trepan como pueden, esperan sus
transportes invadiendo pistas, un carril, lo que dificulta el tránsito de los
vehículos, detienen taxis donde mejor les parece, no usan puentes peatonales, porque
están muy lejos, porque les da flojera, porque les duele la rodilla, porque les
tienen miedo, porque es más rápido cruzar la pista y torear los autos, muchos
pretextos, ninguna razón válida y cada cierto tiempo el noticiero anuncia algún
atropello y lo vemos en la televisión, fueron captados por las cámaras de
seguridad… ¡Qué horror se escucha decir!, y la vida?... continúa… Una señal de
la cruz quizá y todo sigue igual… El peatón es tan caótico como el sistema de
transporte y el caos del transporte en la ciudad…
Veamos
qué pasa con los vehículos en la ciudad, la gente es “fresca como la lechuga”,
se zurra en la norma y les importa un bledo si por su accionar perjudican a
otros muchos que “tercamente” persisten por seguir y respetar las normas,
“pobres ilusos” que no se adaptan a la “jungla de la ciudad”, hasta cuándo van
a ser respetuosos de la ley, así es pues, aún quedan ciudadanos respetuosos de
las normas “una extraña especie humana en extinción”, resistentes a los embates
del cambio climático y hasta hecatombes sociales y urbanos, al parecer
inoculados por los “valores”, una verdadera rareza en nuestras ciudades, habrá
que hacer un estudio, hay que investigar dicho extraño comportamiento “anormal”
para la caótica ciudad… En ese devenir diario, encontramos especímenes
“humanos” que estacionan sus autos en la vía pública a su antojo, ocupando un
carril e impidiendo el libre tránsito vehicular, una excelente forma de
“generar niveles elevados de estrés en hora punta” y contribución para empeorar
la salud pública de la población, habrá que darles un reconocimiento público
porque “multas o sanciones” es imposible que ocurra en nuestra ciudad, es un
insulto y claro pobre de aquel que se atreva a increparle su actitud, recibirá
una andanada de insultos y mentadas de madre por doquier por atreverse a
reclamar por tan grave ¡osadía!, ¿Quién eres tú, para reclamar?, y el resto de
los ciudadanos de a pie, calladitos no más, ¡No hijito, tú no te metas, no es
asunto tuyo, no ves cómo es ese energúmeno?, Pero, pero… ¡Te he dicho que no,
no te metas, evita problemas!... Y zas, quien pierde en el reclamo, quien tenía
la razón… Se queda minimizado, sin apoyo y calladito, renegando tiene que irse
derrotado, con el disgusto, el dolor de cabeza, maldición la hora que le tocó
vivir en esta ciudad y deseando que se mueran todos, que caigan las 7 plagas y
querer salir corriendo o despertar en algún otro lugar del planeta, cualquier
otro lugar será mejor… Y se aleja con un problema en su salud, que aún no lo ha
detectado y quizá más adelante lo pueda descubrir en algún chequeo de rutina,
entonces se enterará que todo esto es un problema de salud pública…
Otra
perla, que hacen los ciudadanos cuando están apurados, detienen un taxi, el
problema, es que lo hacen donde mejor les plazca, y que les importa si
perjudican a los demás, sólo importa su apuro, y su necesidad, y claro cómplice
de ello, el taxista, sea formal o informal igual no más, respeto a las normas,
para que, es chapa tu pasajero o se lo lleva el de atrás, entonces “maniobras
temerarias” vengan a mí es el lema del “señor” del taxi y luego de detenerse
intempestivamente, toca “negociar” el precio, y el tiempo señor, el tiempo
avanza, esos segundos eternos y la fila de autos detrás impacientes, claxon…
luces, gritos, maniobras para cambiar de carril, más luces de los autos del
carril que quieren invadir los que se encuentran atrapados, porque aún no se
mueve el imprudente que estuvo a punto de provocar un accidente porque se
detuvo sin previo aviso, porque en ese momento era “un cazador” y vio a su
“presa” y por “suerte” no ocurre un choque, pero algunos “sustos” y frenazos y
discusiones en el interior de los otros carros, reclamando su forma de manejar,
sin tener mayor culpa, pero, alguien paga y el estrés gana… Problemilla de
salud pública también…
Bueno
similar situación es provocado por el transporte público, no avanzan, se quedan
estacionados en una esquina, esperando sus pasajeros, mientras la luz del
semáforo indica que debes avanzar, otra vez la misma conocida historia, y en
ambos casos, logras ver que un brazo que se asoma y con la mano, el gesto de
avanza, qué amable conductor, te impide avanzar pero te señala que cambies de
carril porque se le ocurrió que no va avanzar y quien está detrás está con su
señal de la direccional que va girar a la derecha y no puede hacerlo mientras
el “amable conductor” de la combi decide que es su “paradero” y espera llenar
su unidad, a renegar, pasar un mal rato, tratar de maniobrar, un poquito
difícil, pero tienes que apelar a que eres un buen “caña”, para no quedar como
un “monse”, entonces te adaptas y arremetes a invadir el otro carril y el
conductor que viene por su carril correcto, se enoja, te enciende las luces de
su unidad, toca con desesperación neurótica el claxon, y luego de tanta
insistencia se rinde y baja la velocidad, te increpa por tu accionar, discutes,
riñes, peleas verbalmente o en ocasiones a puño y patada limpia lo que genera
mayor congestionamiento y el señor de la combi mirando tamaño espectáculo, mira
y “sonríe de medio lado”, con él no es la cosa… Pone primera y se marcha del
lugar, oyendo su rica cumbia… Y te deja atrás con todo el desorden y el caos
que continúa y empeora…
A
propósito de todo esto existen horas punta como todos sabemos y odiamos,
también hay horas del día que la congestión es provocada por algún imprudente
conductor que decide detener su vehículo en una esquina y pedir que le sirvan
su emoliente y su pan con torreja, es que el señor tiene que tomar sus
alimentos y qué importa o qué le importa si con ello obstruye el libre tránsito
en ese carril, lo mismo pasa temprano si te toca transitar cerca de un colegio,
las movilidades escolares se plantan, toman el carril por asalto y empiezan a
descargar cual borreguitos a los chicos que llevan y nuevamente
congestionamiento vehicular porque obstruyen el libre paso, o si es alrededor
del mediodía u hora del almuerzo, si pasas cerca de los restaurantes ni modo te
encuentras calles tomadas, invadidas por hambrientos comensales que usan como
estacionamiento un carril y por consiguiente se angosta la pista a un solo
carril, o si se trata de algún evento masivo, te encuentras con calles
literalmente tomadas por decenas de vehículos por falta de estacionamiento,
claro a sabiendas que es casi imposible encontrar un espacio para estacionar se
movilizan en sus autos para evitar pagar un servicio de taxi remisse, ¿dónde
queda la inteligencia emocional de las personas?, pues si tienes para pagar una
entrada cara, pues chapa tu taxi no? Y así colaboras con la ciudad…
Es
notable cómo el boom de la construcción se ha apoderado de calles sin piedad,
los volquetes por doquier, invaden un carril y tienen “permiso” para ello, y el
libre tránsito, que importa, hay que priorizar lo que deja “impuestos”,
ganancias, utilidades, el tema es para quien no?... Tienen protección policial
muchas de esas obras, un policía se encarga que esos volquetes, mezcladoras de concreto
y lo que sea necesario se tomen el tiempo que quieran para ocupar el carril o a
veces todos los carriles porque se atraviesan de lado a lado por varios minutos
para descargar material, por consiguiente, detienen el libre tránsito y se
embotella la calle y la otra calle y los cruces y se hacen nudos de nudos,
cuellos de botella a veces que parecen interminables como caravanas de
clasificación al mundial… Esto no es todo, ese transitar de vehículos pesados y
también de carga (no se salvan tampoco), deterioran las pistas que desde ya no
tienen buen mantenimiento y cuando las reparan el material es de muy mala
calidad y duran poco tiempo se hunden, se hacen cráteres que el conductor debe
evadir, con maniobras temerarias y generando más caos y mal humor, además de
accidentes muchos con consecuencias que lamentar, los vehículos se dañan más
rápido y pierden valor comercial además de convertirse en peligro para la salud
pública…
Otro
tema vinculado son los rompemuelles antitécnicos que literalmente cumplen su
función y rompen muelles, dañan amortiguadores, palieres y no sé qué otras
piezas de los vehículos, provocan caos, enlentecen el tránsito, y muchas de
ellas no tienen sentido que estén, cuando hay semáforos, estos últimos son un
problema también pues muchos están descompuestos, tienen luces inoperativas,
que confunde pues no sabes si te da pase o no, provoca accidentes, los que
llaman inteligentes son “brutos”, mal calibrados, tardan demasiado en darte
pase, luego tienes 15 segundos o menos para cruzar una avenida ancha tipo
Salaverry por ejemplo, si el chofer de adelante estaba entretenido leyendo su
diario de a china, pierde valiosos segundos y sólo pasa él y los demás a
esperar y la recatafila de autos rugiendo en tu nuca por “lenteja” y sólo
respetas las reglas, que te haces si avanzas te quedas atrapado a medio camino
e invades la ciclovía de las islas por consiguiente te ganas el repudio del
ciclista si es que no te lo llevaste de encuentro por acelerar y querer ganarle
a la luz ámbar, en este momento el nivel de estrés ya está en la estratósfera…
O sea un problema de salud pública… Si nuestros amigos policías o amigas
policías deciden dirigir el tránsito en las vías más congestionadas como la
Javier Prado, entonces es posible que el caos se agudice, ya que el semáforo es
solo un adorno y tú ves con frustración e impotencia que no te dan el pase,
mientras la impaciencia crece a tu alrededor, y es posible que uno que otro
vendedor o limpia lunas te empiecen a acosar en esta jungla urbana, o
malabaristas que se adueñan de las cebras y el peatón cruza por donde puede o
donde quiere, y cuando te dan pase te encuentras con una serie de obstáculos
humanos atravesados por doquier y tu ansiedad se incrementa, tu irritabilidad y
peligra tu salud psicológica… Y para rematar el asunto, es posible que seas
testigo o víctima de un asalto o bujiazo en la espera del ansiado pase para
poder circular… A esto añádale otro componente importante que es el descuido
por parte de los municipios de los parques y jardines por los que todos los
ciudadanos o así debe ser, abonamos en nuestros recibos mensuales o
trimestrales de arbitrios, alumbrado público, limpieza y parques y jardines de
nuestros distritos o sea no es un servicio gratuito de las municipalidades, que
ocurre, pues bien, quienes conducimos vehículos, al menos autos, sabemos que
hay calles donde existen plantas y arbustos “ornamentales” que están colocados muchos
de ellos en las esquinas y cruces que impiden la visibilidad porque están muy
crecidas y eso es un serio peligro de accidentabilidad, lo mismo pasa con los
árboles que no se les atiende adecuadamente, no se les poda y con el paso de
los años se empiezan a inclinar y luego por efectos gravitacionales, daño en
las raíces, etc., se vienen abajo y zas!, obstrucción de la calle lo más
benévolo, el problema se torna más serio si es que cae sobre algún vehículo que
fortuitamente transitaba por el lugar o es más grave aún si cae sobre personas
o dañe seriamente a los ocupantes de los vehículos siniestrados por el impacto
de la caída de ramas o del árbol completo y si hablamos de caídas, pues también
hay postes de alumbrado, de telefonía, etc., que por falta de un adecuado
mantenimiento o por impacto de algún choque están inclinados peligrosamente o
simplemente se caen sin pedir permiso y ocasionan accidentes tan terribles como
la caída de los árboles… A propósito de los postes de alumbrado público, pues
existen muchos que no alumbran nada o bien porque ya cumplió con su vida útil
la luminaria o “foco” y se hizo inútil porque deja a oscuras la calle y en las
noches se torna peligroso transitar por algunas calles, avenidas y otros como
en la zona de los pantanos de Villa hay tramos sin iluminación y hay tremendos
cráteres en las pistas combinaciones perfectas para accidentarse, otros postes
que casi ni alumbran porque sus luminarias son muy débiles o están los postes
muy distanciados que deja en penumbras algunas calles lo que además propicia la
inseguridad ciudadana (otro tema que trataré luego en otro artículo).
La
falta de civismo de algunos ciudadanos que dejan sus desperdicios, basura,
objetos en desuso, desmonte, etc., en plena vía pública, en una avenida, en la
isla o mal llamada berma central y cuando esto ocurre surgen los imitadores que
contribuyen y dejan también su contribución o donación de más desperdicio,
basura, desmonte, etc., lo que evidentemente incrementa el daño ecológico, el
ornato y afecta o daña la salud y últimamente está induciendo a la población a
denunciar posibles bombas o artefactos explosivos, cuando dejan paquetes
extraños, como maletines viejos, maquetas de torta y otros objetos
“sospechosos”, consecuencia de esta “psicosis colectiva” “angustia o pánico
social” se llama a la UDEX policía especializada en desactivar explosivos, hay
que acordonar la zona, impedir el libre tránsito de personas y vehículos y eso
otra vez congestionamiento, estrés, problemas de salud pública…
Será
esto todo lo que tenemos que evaluar, pues creo que no… Existe una norma de
hace unos años que hace obligatorio las revisiones técnicas y no se puede
entender o quizá sí, si no nos hacemos a los tontos o dejamos de ser ingenuos,
cómo es posible que muchas unidades de transporte o vehículos estén en tal mal
estado y no solo contaminan sino que se quedan averiados lo que evidentemente generan
problemas para la fluidez del tránsito, otra vez caos, sin contar claro está
con los accidentes graves que pueden provocar…
Obras
públicas, más caos, te cierran las calles y planes de desvío, o mejor te mandan
al desvío, obras incompletas, desmonte y basura, mala señalización y otra vez
el caos en la ciudad, terminan la obra y no quitan los materiales sobrantes,
todo quedó ya muy bien, y otra vez el caos porque se les ocurre cerrar carriles
porque olvidaron un detalle pintar la pista colocar señales despacio, las
cebras, líneas que dividen los carriles, líneas amarillas, blancas, etc…
Entonces se les ocurre cerrar carriles colocando conos naranja de seguridad
para proceder a subsanar el descuido, por otra parte, también los municipios no
tienen el tino de enviar sus camiones de riego de parques y jardines en
horarios donde no perjudique el libre tránsito lo que ocasiona nuevamente
congestionamiento o no se coordina para el paso del camión recolector de basura
que como muy prudentemente en algunos distritos se realiza en horas de la noche
y de la madrugada donde ya es menor el congestionamiento vehicular… El colmo de
la ineptitud o en criollo la más grande “torpeza por no decir burrada” es la
absoluta falta de previsión y planificación de las obras públicas, está demás
decir, que una vez que el municipio entrega una obra remodelada al poco tiempo
llega Sedapal, Luz del Sur, Edelnor, Cálidda, Claro, Movistar, Bitel, Entel o
cualquier otra empresa para realizar trabajos y rompen las pistas recién
arregladas y las dejan en mal estado o tardan demasiado tiempo para repararlas
o mejor dicho para parcharlas y mal todavía, en consecuencia otra vez los
huecos y baches en las calles de la ciudad…
Y
si hay que movilizar dignatarios o se produce algún evento mundial, te cierran
las calles, plan de desvío otra vez y el caos…
La
imprudencia es tan temeraria que hasta las unidades de emergencia transgreden
las normas, invaden los carriles contrarios, invaden los carriles del
metropolitano, etc… Porque el caos del transporte es tan caótico que no hay
espacio para dejarles el carril libre para que puedan pasar o por último no les
importa a los que están adelante, no es su problema ni su emergencia…
Hay
infractores imprudentes por doquier, dan vuelta donde no deben, corren como si
fuesen fórmula 1 en la vía expresa, hacen concursos de piques ilegales,
conducen ebrios o con otras drogas encima, conducen con carga peligrosa, llevan
cargas en exceso, pasajeros en exceso, no se usa cinturones de seguridad,
retroceden imprudentemente mayormente taxis, conducen entre dos carriles lo que
impide transitar con fluidez mayormente ciertos buses de los grandes y
abusivos, o se atraviesan y no te dejan pasar, se cambian de carril
intempestivamente y luego sacan una mano y te hacen la señal del ok
todo
un caos de caos… Te pones neurótico y embroncado…
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Si
ocurre un tope o te chocan se arma el caos generalizado es de escándalo y se
genera una situación insostenible, mejor arregla no más te dice tu bróker de
seguros, ¿y para qué pagas seguro?... Si te dicen mejor arregle no más aquí, si
no hay que ir a la comisaría, tiene que pagar la prima, debe pasar el dosaje
etílico y va perder su tiempo, mejor arregle… O sea paga tu seguro para
asesorarte que no sigas las normas establecidas para incidentes o accidentes de
tránsito…
Algo
más señor… Que la autoridad o los servidores públicos se adueñan de calles,
pistas y veredas, más aún si son policías o de la fiscalía o de los juzgados
quienes son los primeros en el deber de cumplir las reglas y normas, muchos o
algunos de ellos, aunque deben ser más bien muchos de ellos son los primeros
transgresores de la ley, estacionen donde les parece, por ejemplo, pueden estacionarse
en doble fila, estacionar bloqueando la ciclovía, invadir las veredas sobre
todo frente a la comisaría encontraremos de todas formas, no hay pierde, autos
siniestrados y te dicen que no tienen donde dejarlos, no tienen cocheras o
depósitos y es generalizado, los funcionarios del Estado se apoderan de
espacios que no están destinados a parqueo, es un serio problema y el
perjudicado es el peatón y los que deben hacer uso de las vías para circular.
Las
empresas repartidoras de lo que sea suelen estacionar sus vehículos de reparto
sea gaseosas, abarrotes, gas, repuestos de algo, mercadería en general,
obstruyendo la pista como consecuencia impiden el libre tránsito, lo hace más
lento, lo paraliza, genera mayor congestionamiento y por ende lo mismo de lo
mismo y afecta la salud integral de las personas, o sea un serio problema de
salud pública…
¿Eso
es todo?... ¡No!, ¿no?, pues no, tenemos problemas en las carreteras, que
pueden generar accidentes, como consecuencia de bloqueos por protestas, quema
de llantas, etc… Marchas de sindicatos, marchas de estudiantes, marchas de todo
tipo y bloquean calles, te cierran calles por amenazas de bombas, te cierran
calles por pasacalles, desfiles, procesiones, fiestas, aniversarios, carnavales,
para jugar fulbito, vóley en el barrio, celebrar por lo que sea, hasta los
propios alcaldes de los distritos te cierran calles a su antojo y arman sus
estrados, colocan toldos y tarimas y hasta orquesta incluida y el caos del
transporte se impone, ni siquiera al vecino que vive en dicha calle lo dejan
pasar y lo mandan a buscar otra ruta de acceso…
Con
el tema del incremento de la inseguridad, que no es de ahora sino de muchos
años atrás, los vecinos te ponen rejas de seguridad con o sin autorización
municipal, levantan cercos y muros perimétricos que impiden transitar y se
genera el caos, qué ciudad que tenemos…
Y
qué me dicen si hay un clásico del futbol peruano o juega la selección, las
calles se despejan un ratito mientras están jugando los equipos, pero antes y
después es un caos descomunal, con centenares de personas movilizándose a pie,
en auto, en bus, taxi, etc., súmese las barras y sus respectivas custodias
policiales con motos, patrulleros, serenazgo, policía de la USE, montada, más
congestión… ambulantes de comida, ventas de camisetas y otros souvenirs,
revendedores, ladrones, etc…Y si hay enfrentamientos entre las barras a
esquivar piedras y palos a esconderse donde se pueda se viene la turba y te
dejan “calato” y mancillado en tu honor después del manoseo o paleteo… Vivir
cerca de un estadio es una verdadera tortura para ellos, como ejemplo El
Monumental o Matute…
Algo
parecido ocurre cuando hay algún concierto de algún famoso artista o temporada
de circos, en fechas festivas fiestas patrias, navidad, año nuevo…
Aún
hay más, la costa verde, solo de nombre, es una trampa mortal, ahora más con el
tercer carril y los deslizamientos de piedras de los acantilados es un grave
problema y todo lo que se hace mal o no se hace en transporte genera desorden y
problemas de salud pública… La Costa Verde, es una verdadera trampa mortal, es
insegura, expuesta y vulnerable en caso de sismo, es un grave problema tener
restaurantes instalados en esa zona, es muy grave hacer eventos masivos como
mistura o colocar juegos mecánicos, no hay forma de escapar ante una situación
de emergencia o alerta de tsunami, imposible, si con un maretazo o menos aún el
mar invade las pistas y así ya es muy difícil transitar con fluidez, que sería
si fuesen olas más agresivas o un tsunami que golpee nuestras costas… No
quedaría rastros de nada ni nadie…
Aún
hay más, la imprudencia del peatón que hemos mencionado, han visto que cruzan
temerariamente para ganarle a los autos y una vez que empiezan a cruzar a
sabiendas que vienen los autos simplemente giran la cabeza para el otro lado
porque no quieren mirar lo que se les aproxima, o sea mágicamente “no pasa
nada” si dejan de mirar, o ¿creen que al no mirar ya no hay peligro? Hasta que
en una de esas lo embisten y con suerte despierta en un hospital, otro problema
del imprudente peatón es que cruza sin mirar o hablando por el móvil
distraídamente o concentrados en su conversación y caminando por inercia y del
conductor hay varias cosas que decir, conducir sin cinturón de seguridad, sin
luces reglamentarias o apagadas, sin la revisión técnica, o peor aún con la
revisión técnica adulterada “bamba”, bajo los efectos de sustancias
psicoactivas, sin licencia de conducir, hablando por el móvil mientras conduce,
posteando a través del móvil, chateando, mensajeando y todo esto al mismo
tiempo que conduce su vehículo, algunos conductores hasta tomando sus alimentos
llámese desayuno, almuerzo o cena mientras conducen, exponiendo a sus
pasajeros, o conduciendo buses sin tener el descanso adecuado, esto ocurre en
buses interprovinciales mayormente o transportistas de carga, sin respetar las
normas, a excesiva velocidad y todo lo que señala el reglamento…Operativos
sorpresa previo aviso, el datero que le avisa al conductor, operativo más
adelante, y gracias manito y le lanza sus centavitos, y se burla de la ley y
los operativos, por último si le ponen una infracción, ni la pagan y siguen
circulando, no se interna el vehículo al depósito, ya ni hay espacio, no se
sanciona efectivamente, los procesos tardan años para resolverse, mucha desidia
de las autoridades ante la grave problemática.
Y
seguimos, muchas cosas vemos la hora punta es de terror, las vías se
congestionan, los letreros luminosos, letreros y cartelones colocados para
obstruir la visión del conductor, la mala señalización de los límites de
velocidad, y se viene la campaña electoral y las pancartas serán un suplicio,
no sólo por la contaminación visual, sino por la obstrucción que generan y se
convierte en un peligro de accidentabilidad. Ni que decir, de los juegos
panamericanos del 2019 ¿Qué hace que esto sea así?, es una pregunta
interesante, aparentemente sin solución, un misterio por resolver, ni siquiera
la Reforma del transporte ha sido una solución… Estamos avisados y lo vemos
siempre, La solución es Seguridad Vial respeto a las normas y al reglamento,
difusión desde las escuelas, sanciones reales ejemplares, Tolerancia CERO sea
quien sea el transgresor debe ser igualmente sancionado y seguramente que en
tiempo record tenemos una ciudad ordenada…
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